CONFLICTO ENTRE RUSIA Y UCRANIA. LAS CLAVES DEL CONFLICTO DE UCRANIA

 


Hoy, día 24 de febrero de 2022 es necesario dedicar un capítulo especial al conflicto que se lleva produciendo desde 2014 entre Ucrania y Rusia y que ha dado lugar en la madrugada a la invasión por parte de Rusia y al inicio de los bombardeos muy cerca de la capital, Kiev. Actualmente, los ataques se están produciendo por tierra, mar y aire. El conflicto lleva unas semanas en un punto de inflexión, aunque todos preveíamos lo que estaba por venir. 

El presidente de Rusia, Vladimir Putin ha reconocido la independencia de las regiones rebeldes de Donetsk y Lugansk, que a pesar de estar en Ucrania son favorables al gobierno ruso. Como consecuencia, las tropas rusas se han desplazado hasta allí para defender sus intereses. 

Por su parte, Ucrania ha denunciado que Rusia está violando su soberanía. Intenta formar parte de la OTAN sin éxito porque Rusia intenta impedírselo. Sin embargo, cuenta con el apoyo de esta, una alianza política y militar liderada por Estados Unidos y la Unión Europea. Estos países no se deciden a enfrentarse ni a iniciar un conflicto armado y de momento solo han anunciado sanciones económicas para intentar disuadir a Putin de invadir Ucrania. 

Sin embargo, ya se ha iniciado dicha invasión. Se ha comenzado a lanzar misiles sobre Kiev, y varios carros de combate e infantería rusos se están adentrando en el país. La guerra ha comenzado...

Pero, ¿cuál es el origen del conflicto?



En la actualidad parece que Putin quiere retomar la grandeza de Rusia durante la época soviética, y para ello no duda en recurrir a métodos poco transparentes. Varios gobiernos y organizaciones acusan al presidente ruso de corrupción y de reprimir los derechos humanos para mantenerse en el poder. 
¿Por qué Rusia intenta impedir que Ucrania forme parte de la OTAN? 

La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) es una alianza política y militar creada durante la Guerra Fría que agrupa a 30 países de Europa y Norteamérica. Ucrania no forma parte de la OTAN, pero tiene una posición estratégica: su territorio constituye una frontera natural entre Rusia y la Unión Europea, por eso la OTAN tiene interés en mantener a este país como aliado.

Para Rusia, la expansión de la OTAN en Europa supone una amenaza a su seguridad. El gobierno ruso considera que Ucrania forma parte de su “esfera de influencia” y no quiere que este país forme parte de la OTAN, porque supondría una amenaza militar muy cercana a sus fronteras.

Para la OTAN, tener a Ucrania como aliada y poder desplegar sus efectivos en este país es una forma de proteger a sus miembros de posibles ataques procedentes de Rusia y de otros países enfrentados con Estados Unidos, como Irán o Corea del Norte.

¿Cuáles son los objetivos de Putin?

Rusia aceptó en su momento (apunte sobre el acuerdo de Minsk 2: en 2015 las fuerzas prorrusas de Donbás apoyadas por Rusia habían conquistado más territorio de lo que hoy en día es reconocido como el territorio controlado por las fuerzas prorrusas. Aceptó devolver la ciudad de Mariupu y aceptó los acuerdos de Minsk que consisten en 13 puntos, pero la parte más importante es que Ucrania iba a dar una gran autonomía a la parte del Donbás. Este artículo se refiere sobre todo a la intención de Rusia de interferir en la política tanto interna, pero sobre todo en la política exterior de Ucrania respecto a su posible alianza con la OTAN. Y estos son acuerdos que durante 7 años han mantenido una relativa paz en Ucrania, pero que no se han cumplido: ni el gobierno ucraniano los ha cumplido ni por supuesto Rusia). Este es el comienzo del conflicto después de la anexión de Crimea en marzo de 2014. Ahora, una fecha más cercana que ha empezado de nuevo el comienzo de las tensiones ha ocurrido a mediados de diciembre del año pasado cuando Rusia ha planteado exigencias, y teniendo en cuenta que tenía más de 100000 soldados en la frontera con Ucrania las exigencias claramente las podemos definir como chantaje. Estaba claro que Rusia había puesto estas fuerzas armadas para decir que puede conseguir los objetivos que se plantea por la vía armada, pero que está dispuesta a negociar con Occidente.

Este es el comienzo del conflicto después de la anexión de Crimea en marzo de 2014. Ahora, una fecha más cercana que ha empezado de nuevo el comienzo de las tensiones ha ocurrido a mediados de diciembre del año pasado cuando Rusia ha planteado exigencias, y teniendo en cuenta que tenía más de 100000 soldados en la frontera con Ucrania las exigencias claramente las podemos definir como chantaje. Estaba claro que Rusia había puesto estas fuerzas armadas para decir que puede conseguir los objetivos que se plantea por la vía armada, pero que está dispuesta a negociar con Occidente.

El problema es que Occidente y tampoco Ucrania pueden aceptar realmente las exigencias, las garantías de seguridad de Rusia. ¿Por qué? Ucrania no los puede aceptar porque es un país soberano y un país independiente que no quiere permitir a ningún país que interfiera y que le diga lo que tiene que hacer. Ucrania no quiere renunciar a su deseo de ser miembro de la Alianza Atlántica.

Los EEUU y la OTAN no pueden cumplir las exigencias de Rusia porque estas plantean aparte de una garantía procedente de EEUU y de la OTAN de que Ucrania jamás será miembros de la OTAN, esto no puede ser porque el artículo 10 de la Alianza Atlántica dice lo contrario: cada país puede ser miembro de la OTAN si cumple criterios y si los países miembro lo aceptan. Y los EEUU tampoco pueden aceptar las llamadas garantías de seguridad de Rusia porque estas suponen reconfiguración del orden europeo de seguridad creado después del final de la Guerra Fría.

Se ha pedido que la OTAN retire tanto armamento como los efectivos de las fronteras de antes de 1997, ha pedido que no se arme a Ucrania. Varios países han mandado de manera bilateral las armas defensivas a Ucrania desde que se ha incrementado la tensión en esta crisis. Lo que ha ofrecido Occidente es una serie de negociaciones respecto a la transparencia militar, los misiles, etc. Para Rusia esto no es suficiente y no es lo que ha pedido.

A partir de ahora, ¿cómo se puede desarrollar esta crisis?

1.     Hay que tener en cuenta los últimos discursos de Vladimir Putin. El primero es del pasado lunes 21 de febrero, donde Putin claramente y por primera vez el presidente públicamente no ha reconocido la soberanía y la independencia de Ucrania en el sentido de que ha afirmado en un discurso de 70 min que Ucrania es una creación artificial de Lenin, de la Unión Soviética, de los países occidentales, etc. Cuando dijo esto, podemos suponer que está dispuesto a llegar hasta donde sea para que se cumplan sus objetivos.

1.     El segundo discurso es de esta madrugada (24 de febrero), donde ha hablado de que es necesario desnazificar a Ucrania y desarmarla. Lo de desarmarla podemos vincular con el envío de armamento defensivo de los países occidentales, pero con el concepto de desnazificación, la verdad es que es muy difícil hablar de cualquier interpretación racional, porque el gobierno ucraniano no es nazi y tiene un presidente que es judío. Aquí hay una paradoja.

Ucrania en esto está sola. Cuando los soldados ucranianos miran a su izquierda o su derecha no van a ver a ningún soldado de ningún país aliado que le apoya verbalmente. Y esto es la tragedia de todos nosotros, pero sobre todo de Ucrania.



¿Cómo van a afectar las sanciones económicas a Rusia? 
Estados Unidos y la Unión Europea han anunciado una serie de sanciones económicas que limitan la capacidad de financiación del gobierno ruso y de algunas de las empresas más importantes del país. El objetivo de las sanciones es presionar a Vladímir Putin para que cambie sus políticas y no intente invadir Ucrania.
Las sanciones deben ser cumplidas por los bancos e instituciones financieras de Europa y Estados Unidos, que tienen prohibido prestar dinero a cualquier organismo o empresa rusa: esto afecta a su actividad económica ya que, sin dinero, no pueden comprar ni hacer negocios.
Por su parte, la Unión Europea ha prohibido la entrada de altos funcionarios rusos en los países comunitarios y ha puesto en marcha un embargo comercial con las regiones de Donetsk y Lugansk, que no podrán importar ni exportar productos con el resto de países de la UE. Australia, Canadá y Japón también se han unido a la política de sanciones contra Rusia.

Podemos acceder a la mesa redonda sobre el futuro internacional de Ucrania en este enlace, que es totalmente recomendable. 

Además, hay una web sobre la actualidad de Ucrania, que es el Real Instituto elacano

Por último, como hemos trabajado las exposiciones orales en el instituto en 2º ESO A, una alumna se mostró interesada en investigar sobre esta situación y nos explicó todo lo que está pasando. Ella es Elizabeth Guzmán Álvarez y aquí tenemos su presentación en Genially, bastante completa. 





Seguiremos pendientes de la situación en Ucrania. 

Comentarios

Entradas populares